Pintura Abierta

1. Hipnosis

“El arte es crear una especie de máquina de hipnotizar a otra persona para transmitirle vivencias o experiencias anímicas que no se traducen en hechos perceptibles, el arte es hipnosis”, Mario Levrero

Dos amigas están de vacaciones en una cabaña. Durante la noche se acerca unagran tormenta, las aisla y quedan en medio del paisaje sin comunicación alguna. Tienen alimento, tienen bebida, no les falta nada, pero están aisladas. No pueden salir, no pueden hablar con el mundo exterior, no hay “señal”. Nada es grave, pero todo es diferente al estar aisladas. Una de ellas practica el hipnotismo, la otra no cree en eso.

Después de leer todo lo que llevaron y de jugar cartas y charlar, la que sabe hipnotizar, como un juego, le propone que se entregue a la práctica. Luego de varios intentos fallidos, la que no cree entra en trance hipnótico. En esos momentos (breves) la mujer cuenta lo que en apariencia son los paisajes que la rodean, donde se encuentra, casi como una crónica de viaje. La hipnotizada describe escenas, situaciones, elementos y arquitecturas, imágenes extrañas que no se comprenden claramente, pero que el artífice de estos trances escribe mansamente sobre un block de hojas blancas.

Cada vez que despierta, ella convencida que jamás lograron hipnotizarla, sonríe, como quien gana un partido, sin embargo, la que la vio relatando todo, calla y le dice que quiere insistir, porque sabe que el misterio es más grande que la afirmación.

Fueron varios días de encierro, mientras las condiciones del camino mejoraban, fueron muchos relatos los que describía, sin siquiera saberlo. La amiga anotaba todo, creando un diario intimo que no era suyo sino más bien ajeno…

2. El Garage

Para visitar el estudio de Carina Winschel (La Pampa, Argentina, 1971), hay que ingresar a un garage, sortear los autos allí estacionados, atravesar una puerta
escondida, subir una escalera y, finalmente, entrar a un espacio, blanco, blanquísimo. Se escucha Eric Satie, el espacio da cuenta de sus estudios de arquitectura, todo esta ordenado y en armonía. Los techos semi industriales que recuerdan al garage ahora son el marco de toda una inmensa producción de obra
sobre paredes y piso. La cucha de Otto, su amado Terrier, allí esta con su pelota roja. Hay algo pictórico también en esa cucha.

Antes de ver sus obras (aunque ya conocía su producción) nos sentamos a tomar unos mates y charlar.

Hablar de su infancia también es hablar de su obra: “No hubo adultos en mi infancia, mis padres trabajaban todo el día y yo escapaba a descubrir TODO. Era salvaje, una esponja que miraba todo, siempre fui curiosa”. Y ese TODO al que hace referencia está en sus bellas e inquietantes pinturas. Pareciera que Carina (Carilo, como ella se llama a sí misma) en sus pinturas relatara todo lo que sus ojos atesoraron y atesoran.

Cuando habla de su pintura, habla de supervivencia. La obra se transforma en una herramienta. Ella dice: “Todo es igual de importante” y se nota en sus trabajos.

3. Blanco

“Aún cuando la construcción general (de una obra) se pueda lograr mediante la teoría pura, el elemento que constituye la verdadera esencia de la creación es la intuición”, Wassily Kandinsky, De lo espiritual en el arte (1911)

Hay una primera y una segunda y una tercera impresión al ver sus trabajos. Sus trazos enérgicos, su policromía, su alma inquieta y sus colores vibrantes, pueden llevar a la primera impresión: un trabajo impulsivo y casi catártico. Sin embargo, en la segunda capa (impresión), lo que se ve es algo profundo y silencioso, una trama quieta, una laguna sin fondo, llena de vida, pero silenciosa. No hay nervios, sí pulsión. Hay una luz que atraviesa esa laguna, los follajes, los bosques, las estructuras, los animales. Esa luz que penetra el entramado es la luz de Carina y esa luz lo cambia TODO (otra vez esa palabra), es esa luz (repito) la que nos conduce de manera precisa a ingresar a su mundo onírico y espiritual. Mágico.

La tercera capa es para encontrarla sentada, y quedarse un buen rato, porque ahí se encuentran los secretos mejor guardados.

Cuando Jorge Luis Borges hablaba de la pintura de William Turner, el pintor que le quedó grabado en la retina antes de perder la vista, decía que si bien es cierto que la temática del pintor era la naturaleza (el fuego, las piedras, el mar, los árboles y la neblina), el protagonista de sus obras era EL CLIMA. Pues esto también ocurre en los trabajos de Carina López Winschel.

4. Hipnosis (2)

Hipnosis: método para producir el sueño artificial, mediante influjo personal. Fascinar, asombrar a alguien, atraer, seducir, hechizar, cautivar, embrujar.

La tormenta pasó y finalmente, pudieron salir de la cabaña. El block de notas estaba lleno, como al pasar, y antes de que se despidieran de este viaje particular, la amiga le entrega las notas sin decirle el contenido ni como fueron tomadas. La amiga las guarda de manera distraída ante la emoción de poder salir del aislamiento. Ese block jamás fué abierto ni leído, pero algo extraño ocurrió después de eso. La mujer que jamás había sido hipnotizada comenzó a sentir un cambio, mirando fijo a una liebre, la liebre quedaba atónita, en estado de contemplación, lo mismo le ocurría con pájaros, perros y gatos. Notó para su sorpresa que podía hipnotizar. Nadie sabe si lo practica con humanos, pero sí se sabe que su mirada es potente, magnética, y que ahora ha empezado a pintar.

Nushi Muntaabski
Buenos Aires, marzo 2024

Carina López Winschel nació en General Pico, La Pampa, en 1971. Estudió Arquitectura en la Universidad de Belgrano y Diseño en ABM Escuela de Diseño. Realizó exposiciones en Praxis New York (Estados Unidos), Open Studio (Uruguay), entre otros. Entre sus últimas distinciones se encuentra: Mención de Honor en el 65° Salón de Artes Plásticas Manuel Belgrano (2022) y la Mención en la Bienal Areatec (2018).