“El Proyecto Hábitat se fue desplegando por los espacios públicos como los subterráneos con su carga de no lugar y de pérdida; abrazó aeropuertos, hospitales, hoteles, supermercados, denunció sus contradicciones y fundamentalmente cumplió con un objetivo: abrir nuestra percepción a menudo aletargada. La obra de Fabiana Barreda actúa como un pequeño y discreto dispositivo, de aspecto por momentos ingenuo y lúdico, que vehiculiza una posibilidad para el espectador receptivo: la de recuperar una visión lúcida y ética de la realidad. Las estrategias comunicativas de su poética giran alrededor de la casa, ese espacio físico que nos construye interiormente, que conforma una arquitectura afectiva y emocional que habilita el despliegue de nuestro ser en la intimidad de un hogar”, Corinne Sacca Abadi.